En TécnicosCLIC hemos realizado muchos test en diferentes equipos con diferentes chip gráficos.

Hemos llegado a la conclusión, de que a la hora de reparar un equipo que sufra de chip gráfico, es mejor su sustitución.

Existen varios medios para reparar un problema de chip gráfico.

En algunos servicios técnicos lo que realizan es un proceso llamado REFLOW. Se trata de aplicar calor sobre el chip gráfico durante un corto periodo de tiempo para que el chip gráfico vuelva a entrar en contacto con la placa base o tarjeta gráfica.

Este proceso es muy inestable, ya que en muchos casos, aplican demasiado calor, provocando daños mayores. En la gran mayoría de los equipos que se le han realizado un reflow, tenemos menos posibilidades de colocarle el chip gráfico nuevo. Ya que deforman la placa base, y a la hora de colocar el chip gráfico nuevo, no entra en contacto con la placa base correctamente.

Para realizar este tipo de proceso lo podemos realizar desde con un simple secador de pelo, con una pistola de aire hasta existen aventureros que lo han realizado con un horno, como si la placa base se tratase de una pizza.

Por lo tanto, no recomendamos el realizar el proceso de REFLOW para solucionar el problema de chip gráfico.

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Otro proceso que se realiza para solventar el problema de chip gráfico, es el proceso llamado REBALLING, o mejor llamado REWORK. Se trata de desoldar por completo el chip gráfico, eliminado todo material de soldado. Se realiza el proceso de «Reball», es decir, colocar nuevamente las bolas de soldado al mismo chip gráfico extraído. Se vuelve a soldar el chip gráfico reboleado a la placa base. En muchas ocasiones, el problema no reside tanto en una mala soldadura leadfree (soldadura sin plomo) o leaded (soldadura con plomo), si no en que el núcleo del chip gráfico se encuentra estropeado, y por lo tanto aunque se realice un buen «Reballing» nuevamente en un corto plazo de tiempo volverá a fallar.

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Por lo tanto, después de bastantes pruebas y test, hemos llegado a la conclusión de que la mejor opción para reparar un equipo con problemas de chip gráfico es su sustitución.

A la hora de sustituir el chip gráfico por uno nuevo, colocamos el modelo exacto de chip gráfico. No podemos colocar ni un chip más potente ni uno inferior.

Mejoramos la ventilación interna, para evitar sobrecalentamiento y así de esa manera, evitar daños posteriores.

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Por lo tanto, si el cliente realiza un mantenimiento preventivo correcto al equipo y nosotros realizamos la sustitución del chip gráfico podemos asegurar que no volverá a dar ningún fallo. Para ello, ofrecemos 12 meses de garantía en la reparación.

Aquí pueden ver cómo es el proceso de sustitución de un chip gráfico en un portátil:

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